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Lista de Ilustraciones sobre las Oportunidades:
Se
dice que al principio de la Primera Guerra Mundial, un clérigo de la Iglesia de
Inglaterra compareció ante Guillermo Taylor, obispo, y capellán general del ejército
británico, para pedir colocación como capellán.
Se dice que el obispo Taylor lo miró intensamente por un momento y
sacando su reloj de bolsillo le dijo: “Imagínese que yo soy un soldado
moribundo, que sólo tengo tres minutos de vida, ¿qué tiene que decirme?”. El
clérigo quedó confundido y no dijo nada. Entonces el obispo le dijo: “Ahora tengo dos minutos de vida, ¿qué puede decirme para el bien de mi alma?” Aún con esto, el clérigo permaneció callado. Entonces el obispo volvió a decirle: “solo tengo un minuto de vida, ¿me dirá algo?” Entonces el clérigo sacó su libro de oración, pero el obispo le dijo: “No saque ese libro, pues no es oportuno para esta ocasión”. Y puesto que el clérigo no pudo decirle nada al soldado moribundo, fracasó en su deseo de ser capellán del ejercito.
Un
capellán dijo una vez a un soldado, quien en su niñez había asistido a la
escuela dominical y ahora estaba para morir de una enfermedad:
--Está usted ya terminando su carrera en este mundo. --¿Es
posible? –contestó el moribundo. --Sí,
y espero que esté usted listo para el venidero –respondió el capellán --¡No,
no estoy… no estoy listo… no estoy listo… ! --Bien,
amigo, Jesús está listo siempre, y está esperándole aquí ahora.
Venga. ¿Quiere que oremos? --No,
no, no: es demasiado tarde… demasiado tarde.
Debería haber venido hace mucho. Y
enseguida contó al capellán, con la calma que pudo tener en tales
circunstancias, cómo en una ocasión casi se resolvió a ser cristiano, pero al
fin determinó dejar pasar la oportunidad por otro año.
Y añadió: --Ese era el tiempo; podía haber venido entonces.
¿Por qué no lo hice…? ¿por qué no lo hice?.
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