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Lavamiento Libertad Liderazgo L�mite Logros Luchas Luz 
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Como los jud�os com�an de un plato com�n, sin
cuchillos ni tenedores, era necesario que sus manos estuvieran completamente
limpias para comer. El deber de lav�rselas con anticipaci�n en agua pura era
considerado como asunto de obligaci�n religiosa, y regulado por severas leyes
rituales. Como no usaban zapatos sino sandalias cuando caminaban, al llegar a
una casa los criados lavaban los pies de los caminantes. Algunas veces, como
demostraci�n de mucho respeto, el mismo due�o de la casa hac�a esta
operaci�n. En d�as de fiesta los pies eran, adem�s de lavados, ungidos. Pero
"la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado".
  
  
--Hijo m�o �dijo el jefe �rabe--, ve corriendo al
manantial y tr�eme una cesta de agua. El ni�o fue corriendo y llen� la cesta;
pero antes que pudiera emprender el regreso a la tienda, toda el agua se hab�a
escapado.
Entonces dijo a su padre: --Aunque un gran n�mero de
veces he llenado la cesta de agua, toda se sale pronto.
Entonces el padre tom� la cesta y dijo: --Lo que
dices, hijo m�o, es la verdad. El agua no se ha quedado; pero mira cu�n limpia
est� la cesta. As� ser� con tu coraz�n: no podr�s recordar todos los
preceptos que has o�do, pero procura siempre atesorarlos y har�n tu coraz�n
puro y apto para usos celestiales.
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
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