| PASURSignifica = «prosperidad». (a) Uno de los oficiales que tenían influencia con el rey Sedequías y que   abiertamente se opuso al profeta Jeremías (Jer. 21:1; 38:1, 4, 21). (b) Un sacerdote que puso a Jeremías en el cepo debido a sus sombrías   predicciones (Jer. 20:1-6). (c) Jefe de una familia sacerdotal quien, juntamente con otros, firmó un   pacto en los días de Nehemías (Esd. 2:38).  
         
 PABLO.Origen   y juventud. Saulo   nació en Tarso de Cilicia, centro de cultura y saber griegos (Hch. 21:39), de   una familia judía de la tribu de Benjamín (Ro. 11:1; Fil 3:5) Cuando el martirio   de Esteban (33/34 o 35/36), era aún «joven» (es decir, de unos 30 años; en el   62/63 se llama ya viejo; (Filemón 9); hubo de nacer en los primeros años de la   Era Cristiana. Su familia pertenecía a los «hebreos» (Fil. 3:5), es decir, a los   judíos de lengua aramea, y a los fariseos (Hechos 23:6; Fil. 3:5), y era   irreprochable en cuanto a la «justicia» (Fil. 3:6). Su padre era ciudadano de   Tarso (Hch. 22:28), lo que supone que hubo de ser de buena posición (cfr. Fil. 3:8). Saulo fue circuncidado al octavo día de su nacimiento (Lv. 12:3   Fil 3:5) y recibió el nombre de Saúl (es decir <el deseado>; griego,   Saulos, de donde Saulo) y el romano y el romano de Pablo (Hch. 13:9). El   niño fue instruido en la lengua aramean (Hch. 13:9) y educado en la fiel   observancia de la ley y de las tradiciones de los mayores.  Según   la costumbre judía, desde los cinco años debió de aprender a leer en la Biblia   hebrea. Desde su juventud, Pablo aprendió igualmente la lengua griega, que era   la corriente en Tarso. Por razón de su educación farisea, se duda si frecuentó   también alguna de las muchas escuelas griegas, en aquel importante centro de   cultura helenística. Pablo cita incluso algunos escrítores griegos (Arato,   Phaen. V, 429 [Hch 17:28]; Menandro, Thais [1 Co. 15:33];   Epiménides, Or. [Tit. 1:12)).  A   los quince años, Pablo fue enviado Jerusalén para formarse a fondo en el   conocimiento de la Escritura y de las tradiciones y métodos rabínicos; según   algunos los padres de Pablo se habrían nuevamente establecido en Jerusalén   cuando era aún muy niño. Allí fue discípulo de Gamaliel (Hch. 22:3), hombre   piadoso, pacífico (cfr. 5:34-39) y abierto, que no se sentía hostil a la   cultura griega. Bajo su dirección, Pablo aprendió a fondo el Antiguo Testamento,   los métodos exegéticos de los rabinos y se convirtió en adicto entusiasta de los   fariseos. «celador extremado de las tradiciones de los padres» (Gá. 1:14; Hch.   22:3).  A   su educación rabínica debe Pablo, no sólo muchas ideas religiosas y un   conocímiento a fondo del Antiguo Testamento, sino también su dialéctica. y su   método exegético. Como los rabinos interpretaban los hechos y objetos   mencionados en el AntiguoTestamento como símbolos de la ley, así Pablo explica   los sucesos de la historia de la salud como símbolos de la economía cristiana de   salvación, por ejemplo, Sara como tipo del Nuevo Testamento y Agar del Antiguo   Testamento (Gá. 4:21-31; cfr. 1 Co. 10 6. Pablo veía en el conjunto del   Antiguo Testamento la prepación y figura de la revelación y de la salud traída   por Cristo, e interpretaba la Escritura según la intuición de su fe cristiana.   Así entendido, el Antiguo Testamento revela verdades que no pueden ser   descubiertas ni por exégesis filosófica ni por la historia. Para ello seguía   Pablo el método exegético de los rabinos, según el cual se toman como oráculos   ciertos textos, entendidos fuera de su contexto y desligados del mismo.   Además,Pablo toma ciertos temas a los midras judios, por ejemplo la promulgación   de la ley por un ángel sobre el monte Sinaí (Gá. 3:19),la roca que camina (1 Co.   10:4), los nombres de los magos egipcios (2 Ti. 3:8). Pablo es un rabino   cristiano que posee el espíritu de Cristo y se ha liberado de la mentalidad de   su escuela y de la casuística de sus maestros judíos.  Según   la costumbre judía, Pablo aprendió también un oficio; Pablo era de profesión   fabricante de tiendas (Hch. 18:3), lo que significa o que fabricaba tiendas con   lona comprada para ellas, o, lo que es más probable, que tejía él mismo la lona;   Cilicia era conocida por los Cilicia, tela tejidas de pelo de cabra, de las que   se fabricaban tiendas y mantas de viaje. Durante su actividad apostólica Pablo   ejercía su oficio para ganarse el sustento (Hch. 18:3; 1 Co. 4:12; 1 Ts. 2:9) y   vivir independientemente (1 Co.9:15). La   personalidad de Pablo: Pablo   es la personalidad más influyente en la historia del cristianismo. Desde su   conversión en el camino de Damasco su vida estuvo siempre dominada por una   ardiente devoción a Cristo, quien se convirtió en el motivo, el objeto y el   motor de su predicación, que ha marcado la dirección del cristianismo desde   entonces.  El   exterior del apóstol no era impresionante ni atrayente; sus adversarios le   echaban en cara que «su presencia era poca cosa y su palabra despreciable» (2   Co. 10:10); él mismo alude también a su exigua estatura corporal (2 Co.   10:12-14). Su salud era débil; Pablo sufría una enfermedad que él mismo califica   de aguijón de su carne y bofetón de Satán (2 Co. 12:7-9); es un sufrimiento   doloroso, humillante y crónico, como lo confirma Gá. 4:13-15. Pablo poseía   temperamento de jefe, voluntad de hierro, constancia inquebrantable, sentido   para la iniciativa, extraordinaria capacidad de trabajo y resistencia, y un   carácter conquistador; su carácter era, además, apasionado, impetuoso y   dominador, que se entregaba de modo total al amor o al odio. Mas, junto a su   férrea voluntad, Pablo tenía también un alma de fina sensibilidad y   condescendencia, y un corazón lleno de ternura (cfr. 1 Ts. 2:7s.; 2 Co.   12:15; Gá. 4:19.; Fil.1:8, etc.), que se pegaba a los hombres y despertaba   fuerte simpatía, que sentía profundamente la necesidad y el dolor de los demás.   Como pensador, Pablo fue esencialmente un espíritu intuitivo, que concebía la   religión más por visión inmediata que por razonamiento discursivo. Sin embargo,   fue juntamente un poderoso dialéctico, y su capacidad natural se perfeccionó aún   más por su formación rabínica. La naturaleza y el arte le decían muy poco; era   más bien un psicólogo introspectivo. Sus comparaciones e imágenes están tomadas   generalmente de la vida ciudadana, de los soldados o del derecho.  Pablo   fue un escritor de ingenio, que disponía de un vocabulario extenso y de un   conocimiento sólido de la lengua griega. Su lengua es el griego corriente entre   la clase culta de su tiempo, salpicado con numerosas expresiones tomadas de la   versión griega de los LXX, que era la más común entre los judíos de la diáspora.   Su estilo es cuidado, sus frases se hallan muchas veces sobrecargadas de incisos   y hay ocasiones cuando se presiente más el estilo oral que el cultivo de la   escritura.  No   raras veces, por el movimiento y calor de sus ideas y sentimientos, alcanza   espontáneamente la cumbre de la elocuencia (por ejemplo, 1 Co. 3:21-23; 13; Ro.   8:31-39). Le gusta valerse de la diatriba griega; quiere llegar lo antes posible   a establecer contacto con sus lectores, como un orador con sus oyentes; los   interpela, les dirige preguntas (por ejemplo, Ro. 3:1; Gá. 3:19), hace   intervenir un supuesto adversario (Ro. 9:19; 11:19), pone objeciones (Ro. 2:1,   3; 9:20; 14:4, 20, 22). Ama las antítesis (Dios/mundo, justicia/pecado,   espíritu/carne, espíritu/letra, fe/ley, hombre viejo/hombre nuevo, primer   hombre/último hombre, obras/fe), las personificaciones (del pecado: Ro. 7:13s.,   17; de la justicia: Ro. 10:6; de la Escritura:Gá. 3:8, etc.).  Era   un hombre que creaba interés en torno a sí, que atraía a los demás y emanaba   amistad. La lista de veintisiete nombres en Ro:16 nos descubre una pequeña parte   del círculo de sus amigos íntimos. Escribe una carta a un amigo rico para salvar   la vida y recomendar a un esclavo al cual ha hecho su hermano en Cristo en la   prisión. Es agradecido con los pequeños favores, y se interesa por la iglesia en   Jerusalén cuando los malos tiempos ponían a los pobres en dificultad.  Según   S. Juan Crisóstomo Pablo ocupa el primer puesto en el cristianismo como teólogo,   y no sólo en los primeros siglos , sino en las iglesias de todos los tiempos  Pablo   murió decapitado en el año 67 DC 
         
 PATROS(egip.: «país del mediodía»). Nombre que designa al Alto Egipto; en Is. 11:11, este nombre aparece entre   Egipto y Etiopía. Los egipcios eran originarios de allí (Ez. 29:14). Herodoto informa que Menes, el primer soberano egipcio histórico, residía en   el Alto Egipto; en la época de este rey, toda la llanura situada al norte del   lago Meris era pantanosa (Herodoto 2:4, 15, 99). Isaías profetizó la dispersión del pueblo de Israel y su definitivo retorno   de los más lejanos países, entre ellos Patros (Is. 11:11; cfr. 7:18). Cuando Nabucodonosor se apoderó de Jerusalén, hubo judíos que se refugiaron   en Patros (Jer. 44:1, 2, 15). 
         
 PEKASignifica = «(Dios) ha abierto (los ojos)». Hijo de Remalías y capitán de Pekaía, rey de Israel, a quien asesinó para   apoderarse de su trono. Se entregó al culto del becerro de oro tal como lo había   hecho Jeroboam I (2 R. 15:25-28). Al final del reinado de Jotam, rey de Judá,   Peka se alió con Rezín, rey de Siria, para atacar Judá e imponer otro rey. Los   aliados invadieron Judá en la época en que Acaz había sucedido a Jotam. Los   sirios, con la intención de unirse con Peka en Jerusalén, avanzaron al este del   Jordán. Incendiando y saqueándolo todo, el ejército de Peka se dirigió hacia   Jerusalén, cuyos habitantes estaban aterrorizados. El profeta Isaías aseguró al   rey y al pueblo que el Señor los libraría si se confiaban plenamente a Él.   Menospreciando este consejo, Acaz prefirió comprar la ayuda de Tiglat-pileser   III, rey de Asiria. El ejército asirio atravesó Galilea (2 R. 15:29), llegando a   Filistea en el año 734 a.C., maniobra que obligó a Peka y a Rezín a retirar sus   tropas del país de Judá, a fin de proteger sus propios estados. Al retirarse,   Peka deportó a gran número de habitantes de Judá, pero ciertos príncipes de   Israel los vistieron, alimentaron y dejaron en libertad, gracias a la   exhortación del profeta Obed (2 R. 16:5-9; 2 Cr. 28:5-15; Is. 7:1-13). En el año   730 a.C., Oseas, hijo de Ela, dio muerte a Peka, usurpando a su vez el trono de   Israel (2 R. 15:30), actuando en complicidad con Tiglat-pileser III. 
         
 PEKAÍASignifica = «Jehová ha abierto (los ojos)». Hijo de Manahem, lo sucedió sobre el trono de Israel hacia el año 737 a.C.,   reinando dos años, y adoptando el culto del becerro de oro que Jeroboam I había   instituido. Pekaía fue asesinado en su palacio de Samaria por Peka, uno de los capitanes   de su ejército, que usurpó el trono (2 R. 15:23-26).  
         
 PELEGSignifica = «división». Hijo o descendiente de Heber (Gn. 10:25; 11:16). La «división de la tierra»   aquí mencionada es enigmática. Hay expositores que la refieren a la dispersión   de los descendientes de Noé después del acontecimiento de la Torre de Babel.   Otros proponen que en esta época se dio un cataclismo a escala global que   provocó una deriva de continentes con una velocidad que ha ido en gradual   disminución. (Véase la consideración de ambos puntos de vista en la   Bibliografía).  
         
 PEDRO  (equivalente griego del nombre arameo kefa: <<piedras>>).  El   Nuevo Testamento utiliza dos veces el antiguo nombre hebreo «Simeón» (Hch.   15:14; 2 P. 1:1), 48 veces el griego «Simón», 20 veces (casi todos en Juan) el   compuesto «Simón Pedro», y 153 veces «Pedro» (equivalente al arameo Cefas, que aparece 9 veces).  Era   hijo de Jonás (Mt. 16:17; cfr Jn. 1:42), casado (Mt. 8:14; Mr. 1:30; Lc.   4:38; su esposa lo acompañaba aún en la época apostólica, 1 Co. 9:5), hermano de   Andrés y, probablemente como éste, afectado por el ministerio de Juan el   Bautista (Jn. 1:39s.; Hch. 1:22). Los evangelios lo consideran oriundo de   una ciudad a la orilla del Mar de Galilea (pertenece al grupo de los galileos:   Mr. 1:21-29 y / o Betsaida: Jn. 1:44), donde ejercía con su hermano y algunos   socios el oficio de pescador (AR. 1:29; LC. 5:10). Quizás había tenido contactos   con la cultura helénica y había aprendido el griego, pero conservaba el acento   galileo de su arameo materno (Mr. 14:70). Es considerado un pescador rudo,   hombre de pueblo, sin especial instrucción (Hch. 4:13), aunque no hay por qué   dudar de que supiera leer y escribir. Pedro,   discípulo de Jesús: Pedro   probablemente conoció a Jesús por intermedio de Andrés (Jn. 1:41), su hermano,   casi al comienzo del ministerio en Galilea (Mr. 1:16s.). Después fue agregado al   grupo íntimo de los doce (Mr. 3:16ss.), en cuya lista siempre ocupa el primer   lugar (Mt. 10:2; Mr. 3:16; Lc. 6:14). Jesús le llamó Cefas (= Pedro) desde el   comienzo (Jn. 1:42); Marcos lo llama   siempre Pedro a partir de 3:16, y no hay razón para pensar que este nombre se   originara en Cesarea (Mt. 16:18). Como tampoco se le deben atribuir cargos, ni   mucho menos honores que no han tenido su origen en la predicación de Jesús,   tales como el papado, por ejemplo. Forma   parte del grupo de los tres más íntimos de Jesús (Mr. 5:37; 9:2; 14:33). A   menudo actúa en nombre de los doce (Mt. 15:15; 18:21; Mr. 1:36s.; 8:29; 10:28;   11:21; 14:29ss.; Lc. 5:5; 12:41). Su confesión en Cesarea es representativa (Mr.   8:27, 29), pues la pregunta fue dirigida a todos. Fue testigo de la   transfiguración (Mr. 9:1; cfr. 1 P. 5:1; 2 P. 1:l6ss.). Su jactancia en   Mr.14:29ss. quizá sea también representativa. Su debilidad es tan evidente como   sus pro-mesas de lealtad (Mr. 14:66ss.) y los evangelios no la soslayan. El   mensaje de la resurrección señala especialmente a Pedro (Mr. 16:7) y es él quien   recibe una manifestación especial del resucitado (Lc. 24:34; 1 Co. 15:5). Aunque   su papel en el cuarto evangelio sea más atenuado y el discípulo amado juegue un   papel más importante, la intervención de Pedro siempre aparece decisiva   (verbigracia, Jn.6:68s.; 21:15-19). El   episodio narrado en Mt. 16:17ss. ha sido uno de los pasajes más debatidos,   particularmente la sentencia del Señor: «Tú eres Pedro, y sobre esta piedra   edificaré mi iglesia.» No hay razón suficiente para dudar de Ia autenticidad de   este pasaje, como algunos han pretendido, ni para ubicarlo en otro contexto,   como han hecho otros. Dos   interpretaciones, ambas muy antiguas, se nos ofrecen como verosímiles: 1) La   roca es lo que Pedro confiesa con sus labios, es la fe por medio de la revelación en la misión divina y   mesiánica de Jesús, la base sobre la cual Cristo edificará la iglesia cristiana,   «el resto de Israel» que resistirá los embates de la persecución y las   asechanzas del mal. «La roca es la fe de Pedro», según Orígenes, S. Agustín y   otros Padres de la Iglesia. La Iglesia será construída sobre esta confesión   apostólica (cfr.Ef. 2:20). 2) La roca es el mismo Pedro (Tertuliano y   otros). La   segunda interpretación es más simple (Mt. 16:19 aparece en singular y tiene que   haber sido dirigida al mismo Pedro). Debe quedar absolutamente claro, sin   embargo, que esta interpretación (y el pasaje en cuestión) no tiene ninguna   relación con la idea de una sucesión apostólica (Ia función que Pedro recibe es   en pro de la fundación de la Iglesia y, por tanto, irrepetible), ni con una   autoridad absoluta («el poder de las llaves» es atribuido a los doce: Mt. 18:18)   y reside en el anuncio de Jesucristo como el Hijo de Dios; no es una autoridad   jurisdiccional (cfr. Is. 22:22; Mt. 23:13; Ap. 1:18; 3-7; 21:25). Después   de Pentecostés Pedro curó a un hombre en la «puerta Hermosa» del templo (Hch.   3:1-10), y predicó otro sermón (Hch. 3:11-26) que causó la detención de Juan y   la suya (Hch. 4:1-3). La mañana siguiente Pedro habla valientemente ante el   sanedrín (4:5-22). En el episodio de la muerte de Ananías y Safira explica el   porqué del castigo divino (5:1-11). Pedro y Juan continúan el trabajo con Ia   iglesia en Samaria después de la etapa de evangelización iniciada por Felipe   (8:14-28), y fue aquí cuando tuvo lugar el reproche de Pablo. Luego, Pedro cura   a Eneas (9:23-34) y hace la resurrección de Dorcas (9:36). Después   de la ejecución, por Herodes Agripa, de Santiago el Mayor (año 44), Pedro fue   también detenido, pero milagrosamente liberado (12:3-19). Entonces «marchó a   otro lugar» (12:17), indicación que desgraciadamente no puede precisarse con más   exactitud. En todo caso, en el año 49/50 Pedro está de vuelta en Jerusalén y   habla ante el concilio de los apóstoles (Hch. 15:7). Este decidió Ia cuestión de   los cristianos de la gentilidad; de los judeocristianos no se dijo nada. Aunque   judeocristiano personalmente, Pedro no se atuvo a la ley mosaica, sino que   trataba, sin más, con los cristianos de ha gentilidad en Antioquia y comía con   ellos sin atender a las leyes del Antiguo Testamento sobre alimentos. Mas, al   llegar judeocristianos de Jerusalén, cambió y observó ha ley mosaica por razones   de oportunidad. Es segura ha tradición que afirma que Pedro proveyó información   para el evangelio de Marcos. Pedro,   el hombre de fe ardiente, de pasión dedicada a la causa de Cristo, amigo   generoso de Jesús que dejó todo para seguirle, fue uno de los pilares escogidos   por Cristo para predicar el cristianismo, a pesar de su superficial entusiasmo y   de su carácter contemporizador y que se acomodaba fácilmente a las presiones del   más fuerte. Sus enseñanzas y sus hechos fueron pilares para la construcción del   cristianismo naciente; si su personalidad se asemeja a la comunión católica   romana, ciertamente no podemos decir con seguridad que fue el fundador de la   comunidad cristiana en la capital del Imperio Romano. 
         
 PÉRSIDA= «persa». Cristiana de Roma, que había trabajado celosamente para el Señor. Pablo la hace saludar (Ro. 16:12). 
         
 PICOLCapitán del ejército de Abimelec, rey de Gerar, estuvo presente durante la   celebración de un pacto entre Abimelec y Abraham. También asistió a la alianza   de Isaac con Abimelec, o con su sucesor que llevaba su mismo título (Gn. 21:22;   26:26). 
         
 PONCIO PILATO.  Poncio Pilato era el procurador romano de Judea cuando Cristo fue   crucificado (Mateo 27:2; Marcos 15:1; Lucas 23:1; Juan 18:28‑29). Era   personalmente responsable ante el emperador Tiberio por las cuestiones   financieras, civiles, militares y penales de su provincia de Judea. La fama de   Pilato obedece principalmente a su papel en el proceso y crucifixión de Jesús.   Trató de librar a Jesús, pero el pueblo, por el contrario, exigió la libertad de   Barrabás el ladrón. Al condenar al Señor, Pilato desoyó su   conciencia y las advertencias de su esposa. Llamó a     Cristo "Rey de los   judíos". Se cree que Pilato fue destituido de su puesto por Vitelo, gobernante   de Siria, por haber ejecutado a muchos samaritanos. Iba rumbo a Roma para ser   juzgado cuando murió el emperador, y se cree que de algún modo Pilato se salvó   por entonces. La historia no vuelve a mencionarlo.  
         
 POTIFAR(egip.: «aquel que Ra [dios solar) ha dado»). Oficial de Faraón y jefe de la guardia. Los madianitas le vendieron José. La   esposa de Potifar trató de seducir al joven esclavo pero al no conseguir sus   propósitos lo acusó falsamente y lo hizo encarcelar por Potifar (Gn. 37:36;   39:1-20).  
         
 PRISCILA.  (lat., «ancianita»). Esposa de Aquila, viajaba con él. El celo de ella en difundir el Evangelio la   hizo destacar al lado de su marido (Hch. 18:1-3, 18, 26; Ro. 16:3; 2 Ti.   4:19). Muy apreciada por el apóstol Pablo, es en algunas ocasiones mencionada antes   que Aquila.  
         
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