VERBO, EL
En el griego, la palabra "Verbo" es logos. También puede traducirse "palabra". Se emplea en muchas partes y con diferentes sentidos, pero interesa especialmente ver cómo se emplea acerca de Jesús. En Juan 1:1 "En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios". El Verbo es divino, y éste "se hizo carne y habitó entre nosotros" (Juan 1:14). En otros términos, Jesús es el Verbo de Dios quien representa a Dios ante nosotros y a nosotros ante Dios (vea Mediador). El término logos tabién se emplea con referencia a las Escrituras (Rom. 9:6; Heb. 4:12), la enseñanza de Cristo (Luc. 5:1), y el mensaje del Evangelio (Hech. 4:31).
La Palabra de Dios
Es inspirada: "Toda escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia" (2 Tim. 3:16).
Es verdad: "La suma de tu palabra es verdad" (Psalms 119:160).
Liberta: "...si permanecéis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres" (Juan 8:32).
Produce fe: "Así que la fe es por el oír, y el oír por la palabra de Dios" (Rom. 10:17).
Juzga: "La palabra de Dios es viva, eficaz y más cortante que toda espada de dos filos: penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón" (Heb. 4:12).